Vie. Dic 8th, 2023
    Litigio en Jersey City arroja luz sobre la política controvertida del uso de cannabis fuera de servicio

    Un reciente litigio presentado por dos oficiales de policía de Jersey City arroja luz sobre la polémica política de la ciudad de sancionar a los agentes del orden por el uso de cannabis fuera de servicio. Los oficiales afirman que la postura del alcalde Steven M. Fulop sobre la marihuana es simplemente un movimiento político para ganar votos conservadores para su próxima campaña para gobernador.

    El conflicto surge a raíz de la decisión del alcalde de despedir a los oficiales que dan positivo por THC, el componente psicoactivo del cannabis, a pesar de que el fiscal general del estado desaconseja realizar pruebas a los agentes por el uso de cannabis fuera de servicio. Esta discrepancia entre las políticas estatales y a nivel municipal ha llevado a una batalla legal en la que los oficiales solicitan la liberación de documentos y registros adicionales mientras desafían la política de empleo de Jersey City.

    Los críticos argumentan que el enfoque del alcalde Fulop es simplemente una estrategia política sin fundamentos sólidos. La Orden Fraternal de la Policía de Nueva Jersey lo considera un «desafortunado derroche de dinero de los contribuyentes», ya que la ciudad ya ha incurrido en importantes gastos legales.

    Además, la demanda revela un intercambio de correos electrónicos entre el alcalde Fulop y el Director de Seguridad Pública de Jersey City, James Shea, en el que el alcalde se refiere a sus acciones como una «pequeña revuelta». Los oficiales afirman que este comentario frívolo ejemplifica la naturaleza política de la política de cannabis.

    La situación se vuelve más complicada cuando se considera que ambos oficiales ya han sido restituidos a sus cargos por órdenes de la Comisión de Servicio Civil del estado. A pesar de esto, el alcalde Fulop continúa desafiando estas órdenes legales, lo que plantea dudas sobre su disposición a cumplir con el estado de derecho.

    El estado de Nueva Jersey revisó recientemente sus políticas de pruebas de drogas, prohibiendo las pruebas de marihuana en la mayoría de los casos después de la legalización del cannabis en el estado. Sin embargo, los agentes del orden aún pueden ser sometidos a pruebas de THC si hay sospecha razonable de uso de cannabis en servicio o si los requisitos federales así lo dictan.

    A medida que avanza la demanda, el debate sobre el uso de cannabis por parte de los agentes del orden fuera del horario laboral continúa. Queda por ver si el conflicto entre las políticas estatales y municipales se resolverá o si se requerirá una acción legislativa para abordar el problema.